Ethan Hunt, la manifestación viva del destino
La saga de Misión Imposible
se mantiene viva y no da muestra alguna de sufrir una recaída grave. Al menos
esa es la impresión que queda al término de esta quinta entrega, que llegó con
la fuerza de un aluvión tras su desenfrenado tráiler. Con Christopher McQuarrie al mando de la dirección (también del guión),
la franquicia parece no sólo estar a salvo, sino incluso rejuvenecer. El baño
de frescura que le imprime el realizador de Jack
Reacher impacta y contagia. Misión
Imposible 5: Nación Secreta representa probablemente el mejor estreno
pochoclero en lo que va del año.
Con la FMI disuelta y con Ethan Hunt (Tom Cruise) a la deriva, el equipo tiene que enfrentarse contra el
Sindicato, compuesto por agentes especiales altamente entrenados. Los actos de
terrorismo que pueden ocasionar estos grupos ponen en alerta a Ethan, decidido a
reunir a sus hombres de confianza a la vez que es acompañado por la agente Ilsa
Fraust (Rebecca Ferguson), quien
puede que sea miembro o no de esta nación secreta.
Sorprende el hecho de que luego de una importante cantidad de misiones,
caracterizadas por su elevado grado de complejidad, se idee una nueva aventura
en la que los giros y la solidez narrativa formen parte de los puntos más
fuertes del film. McQuarrie se las
ingenia de modo que el relato, con sus inteligentes vueltas de tuerca, se
aproxime lo mayormente posible, en nivel de satisfacción, a la adrenalina
propia que se desprende de cada una de las frenéticas secuencias de acción. Sus
dotes como guionista le permiten conseguir que ese cóctel acabe siendo
explosivo y convenza al público. No se trata simplemente de un episodio más,
sino de una agradable bocanada de aire fresco.
La manifestación viva del destino es la frase que Hunley (Alec Baldwin) elige para referirse a
Ethan Hunt. Nuestro protagonista, encarnado por Tom Cruise, con el carisma y la impronta que siempre posee, vuelve
a hacer de las suyas y a introducirse en una situación más enredada que otra.
Ethan sabe y está seguro de lo que puede llevar a cabo, por ende parece tener
la certeza de lo que va a acontecer cuando emprende una misión.
Mención especial merece el rol desempeñado por Simon Pegg: el actor británico genera un alto grado de empatía
(como suele ser costumbre), producto de la espontaneidad con la que se
desenvuelve en sus intervenciones. La sueca Rebecca
Ferguson combina con eficiencia la frialdad y la rigidez que requiere su
personaje, resultando convincente.
Misión Imposible 5: Nación Secreta es un ejercicio de acción que sabe cómo
contrarrestar la previsibilidad de los sucesos que exhibe; el observador no estará
exento de sentir una aguda tensión a pesar de que pueda predecir cómo concluirá
determinada escena. Este es uno de los aspectos que la diferencian de otras
tantas producciones taquilleras en las que lo estruendoso se impone holgada y
vacuamente a la sensación de peligro.
Entretenida, portadora de un ritmo endemoniado, con toques de humor e
inteligentemente concebida, la proyección engendrada por Christopher McQuarrie no da respiro ni mucho menos lugar a que el
espectador mire su reloj.
LO MEJOR: la dinámica desenfrenada y voraz del film. El guión.
Las vueltas de tuerca. El humor que se le imprime a determinadas instancias. El
carisma de Cruise y de Pegg. Supera con creces a la entrega
anterior. La épica escena que se da debajo del agua.
LO PEOR: la exageración desmedida en alguna que otra secuencia.
PUNTAJE: 9
Se extrañaba el blog. ¡Hacía bastante que no lo actualizabas!
ResponderEliminarLe tengo ganás a MI:5. Siempre me resultó una saga simpática. Eso sí: voy a esperar a que salga en torrents porque camino con los codos, jaja. ¡Saludos!
Jajaja, y bueno, suele pasar. Una lástima, vale la pena en cine, si llegás a poder aprovechala. Luego me contás qué te pareció. Saludos!
EliminarLa voy a ver prontamente, tarde pero seguro je! Parece la mejor de la saga por tu crítica! Veremos! Saludos!
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