La oscuridad de Brooklyn
El director belga Michael Roskam
es el encargado de sacar adelante a The
Drop, del autor Dennis Lehane,
reconocido por sus trabajos precedentes al destacarse en el guión de novelas y
obras literarias tales como Mystic River,
Gone Baby Gone y Shutter Island, las cuales salieron airosas a la hora de ver el
resultado plasmado en la gran pantalla.
Aquí se trata también de un thriller en el que el realizador posa su
confianza sobre Tom Hardy para que éste
encabece el relato en el rol de uno de los encargados de un bar de Brooklyn
regenteado por la mafia chechena. Lo acompaña su primo, el fallecido James Gandolfini en lo que representó su
último papel (llevado a cabo de manera solvente, como ha sido siempre).
Cualquier cosa puede suceder en las calles de aquel barrio
neoyorquino. El frío, las personalidades que emergen y los acontecimientos que
se van sorteando (algunos inquietantes, otros más bien intrigantes) dotan al
asunto de una oscuridad que le queda como anillo al dedo a la historia. Incluso
el drama (y el romance) cobra presencia en el film con la aparición de la convincente
Noomi Rapace, quien ya había
demostrado su capacidad para conectarse de forma naturalmente emotiva en Dead Man Down. Su personaje representa
una suerte de cable a tierra para Bob, el sujeto serio y casi inexpresivo que
compone Tom Hardy. En The Drop también es clave la aparición
de un pitbull cachorro, lastimado, en un cesto de basura. Rocco, nombre que le
da el protagonista al can, sirve como un nexo entre los últimos dos personajes
mencionados y asimismo coopera al momento de sacar a relucir el costado más
abierto y cordial de Bob, en una suerte de proceso de humanización de nuestro
intérprete central.
La película se vale de un ritmo sosegado que sabe mantener entretenido
al espectador gracias al buen pulso narrativo con el que Roskam expone los hechos. Existen instancias en que se percibe una
muy buena construcción de diálogos que ameniza lo que el público se encuentra observando.
Vale resaltar que cuando los silencios están bien manejados (como aquí ocurre)
y no incomodan (en el sentido denso de la palabra), las cuestiones se tornan
más llevaderas.
A pesar de que no se trate de un thriller que sorprenda por vueltas de
tuerca agudas, es acertado mencionar que se guarda algunos giros interesantes que
salen a la luz al momento casi culminante de la proyección. Incursionando en el
policial y en lo dramático, intercalando ambos sin dificultades y con algunas
buenas dosis de tensión, The Drop
termina dejando un buen sabor, aunque no trascienda.
LO MEJOR: Hardy, Gandolfini y Rapace.
La historia, llevadera, bien narrada. Se consigue crear una cautivadora
atmósfera oscura.
LO PEOR: no llega a conquistar por completo.
PUNTAJE: 7,5