domingo, 24 de febrero de 2013

Películas del Recuerdo - El Maquinista (2004)



Atrapante obra bañada de misterio en estado puro

El Maquinista es una extravagante película dirigida por Brad Anderson que cuenta con muchos aspectos curiosos y dignos de destacar. Por ejemplo, uno de ellos radica en el personaje que encarna Christian Bale aquí, un enfermizo y esquelético sujeto por el cual el actor británico adelgazó más de 28 kilos en cuatro meses, llegando a pesar 54 kg. El director del film afirmó que su protagonista sufrió agotamiento para acercarse al espíritu de la figura en cuestión, teniendo en oportunidades que dormir durante las dos noches anteriores a la escena a rodar. Una dieta a base de café, una lata de atún y/o una manzana al día.


En lo que concierne a la historia y el desarrollo de la cinta, contamos con un estrambótico Trevor Reznik, empleado de una fábrica y con un aparentemente interminable problema de insomnio, el cual no hace más que provocarle alucinaciones y un terrible deterioro de su condición física y mental. Híper solitario, el actor de American Psycho es en principio rechazado por sus compañeros de trabajo por su aspecto, y luego prácticamente odiado cuando uno de ellos pierde un brazo en un incidente en el que Trevor se ve involucrado.
El relato está bañado de un misterio increíble, con una música intrigante y una dirección de fotografía brillante, caracterizada por una iluminación y un filtro de color frío, para aumentar así la ambientación siniestra como marca registrada de la película. La actuación de Bale realmente es admirable y atrapante a la vez. El Maquinista es un muy inteligente thriller psicológico, una crónica de culpas en donde el protagonista esconde un secreto que no podemos develar hasta el final (salvo algunos pequeños detalles fáciles de predecir), un film el cual permite que el espectador cambie su postura de modo tal que no pierda enfoque ni concentración en cada acontecimiento que vaya transcurriendo.

LO MEJOR: la intriga que se le imprime constantemente. El guión, la interpretación descollante de Bale y elementos técnicos.
LO PEOR: abusa, quizás, del aplique de la banda sonora en secuencias en donde no se precisa que esté sonando.
PUNTAJE: 8,50

miércoles, 20 de febrero de 2013

Duro de Matar: un buen día para morir - Crítica



Mclane y Mclane Junior a puro despilfarro de municiones

La quinta entrega de la saga provocó cierto revuelo y expectativa. Con seguridad es la más floja de la serie, pero ello no quita que brinde un ameno entretenimiento y un dispendio de increíbles explosiones.
En esta oportunidad, Mclane padre intentará rescatar a su hijo en Rusia y termina trabajando con él, encontrándose con la grata sorpresa de que éste es un agente de la CIA. Un Bruce Willis que pese a estar a 25 años de la primera Duro de matar sigue otorgándonos un incansable ritmo, esta vez empujado por el plus que le da el hecho de tener que “proteger” a su insensible retoño.
Lo que se puede destacar es un manejo de cámara muy moderno y creativo por parte de John Moore, con secuencias de mucha adrenalina y dinamismo. La acción dice presente casi todo el tiempo y los disparos, las explosiones masivas y los bombazos copan la pantalla intentando conservar el espíritu de todas las ediciones, aunque por momentos de un modo tan exagerado que nos hace fruncir el ceño un poco.
Acertadas pinceladas humorísticas, tiroteos por doquier y alguna que otra vuelta de tuerca interesante, la película peca de tener un guión muy poco elaborado y unos enemigos mucho más débiles de los que estábamos acostumbrados a ver y disfrutar en todas las anteriores cintas.

LO MEJOR: mantiene la acción, los efectos, explosiones y tiroteos.
LO PEOR: no llega a generar una tensión vibrante, el guión, los villanos no parecen estar a la altura.
PUNTAJE: 6,80

domingo, 17 de febrero de 2013

Las ventajas de ser invisible - Crítica



Cómo llegarle al espectador con un film pequeño y bien narrado

Las ventajas de ser invisible nos remite a la historia de Charlie, un jovencito sumamente tímido, ese típico muchachito al que las películas norteamericanas con temática escolar nos muestran como retraído, apartado, huraño, pero de gran corazón. Para él, que viene de sufrir el suicidio de su primer amigo y el acecho de su enfermedad mental, los días en la secundaria son un fastidio, hasta que conoce a un grupo de personas en el que parece encajar a la perfección y sentirse por fin a gusto.
Lo que nos ofrece la cinta es una conjugación muy buena de todos aquellos elementos que permiten que el espectador se sienta conmovido y experimente escena a escena distintas sensaciones. Casi todas ellas tienen que ver con la melancolía, la angustia, los miedos. Aborda todos esos asuntos que marcan un antes y un después en la adolescencia, como el primer beso, las drogas, la música, la homosexualidad, la fuerza y el dejo de tristeza que genera a la vez el amor juvenil y demás.
Charlie explaya sus más íntimos sentimientos a través de la escritura, como una forma también de relato del film. Sin lugar a dudas, Las ventajas de ser invisible está bien lograda porque toca el interior del público, sabe llegarle a base de un drama prolijo, bastante lento pero efectivo.
Con actuaciones realmente interesantes y alguna que otra pizca de comedia, queda la sensación de que algo le ha faltado para subir uno o dos peldaños más en la escalera de las películas trascendentes.

LO MEJOR: lo bien que se manejan las emociones. Por momentos conmueve. Buenas interpretaciones.
LO PEOR: si bien es un drama, en ciertas instancias peca de ir más lento de lo que se espera.
PUNTAJE: 6,60 

miércoles, 6 de febrero de 2013

El último desafío - Crítica



El “abuelo” Arnold de regreso… y recargado

Schwarzenegger, supo ser un policía de elite en Los Ángeles. Maltrecho y agobiado de tanto caos y derramamiento de sangre allí, pasa sus días en un pueblito de Arizona (que está en la frontera) como el sheriff encargado de la seguridad de estos lugareños. Allí se conocen todos, los vecinos le tienen un gran respeto y un cálido afecto.
Pero en la gran ciudad, un narcotraficante muy peligroso con un auto que más bien parece volar se escapa en dirección a México. El FBI hará lo imposible por frenarlo, pero todo parece indicar que se tendrá que topar con el gran Arnold y sus precarios e inexpertos ayudantes pueblerinos.


El último desafío es una buena película. Sin dudas. Es una especie de western bien pintoresco, con acertadas pinceladas humorísticas y una mística aventurera muy particular, que se disfraza por momentos de un thriller sencillo y repleto de disparos. Lo destacable es la acción y la dinámica que le imprime el director a cada escena. El entretenimiento está por demás garantizado y no hay lugar para diálogos innecesarios que desvíen la atención, porque precisamente el foco está puesto en los enfrentamientos, en los fogonazos que se dan y en el desparramo de municiones.
Guión simplísimo y previsibilidad como puntos negativos, todo lo demás es muy ameno a nuestro sentido visual. Schwarzenegger lleva a cabo una actuación muy digna y apreciable, imponiendo su porte y autoridad, y las contadas apariciones del carismático personaje interpretado por Knoxville acrecientan el lado humorístico y divertido del film.

LO MEJOR: entretenimiento al máximo, desborda de acción y dinamismo. Arnold y Knoxville.
LO PEOR: guión poco elaborado.
PUNTAJE: 7